Poseer una casa es una de las mayores inversiones que puede hacer una persona, pero cuando se trata de venderla, se recomienda encontrar a un agente de bienes raíces para llevar a cabo el proceso.
Después de la venta, los agentes tanto del comprador como del vendedor, comparten un 7% aproximado de la venta como comisión, lo que equivale a una fuerte porción de las ganancias, perdida en estos salarios.
Las personas que tienen una amplia experiencia en la compra y venta de propiedades, han notado que es un proceso que los vendedores pueden realizar por sí mismos, pues de otro modo, se pueden perder grandes cantidades al contratar a un agente.
¿Qué hace un agente de bienes raíces?
Un agente de este tipo debe realizar cuatro actividades principales para poder obtener su comisión:
- Anunciar la propiedad en el Servicio de Listado Múltiple (MLS por sus siglas en inglés)
- Anunciar la casa por medio de folletos, publicidad, y una página web
- Facilitar visitas a la casa, haciendo eventos como “open house” o tours
- Actuar como intermediario en las negociaciones con las compañías que cierren la venta
Aunque puedan parecer actividades difíciles, si ya se tiene un poco de experiencia en la compra y venta de propiedades, se puede realizar el siguiente proceso para vender de manera independiente una propiedad.
Cómo ser el propio agente de bienes raíces al vender una casa
1. Ponga un precio a la propiedad
Antes incluso de anunciar la casa en el Servicio de Listado Múltiple o en cualquier medio informativo, debe asegurarse de haberle puesto un precio correcto y competitivo a la casa. Puede usar el internet para averiguar los precios de casas similares a la suya, o incluso ubicadas en el mismo vecindario, y tasarla de manera acorde.
Suele ser un paso más difícil para aquellas personas que han vivido en la propiedad durante mucho tiempo, pues tienden a sobrevaluarla, especialmente si han hecho remodelaciones o invertido mucho en la decoración.
Uno de los peores errores que se puede cometer es subir demasiado el precio de una propiedad, pues esto puede generar que permanezca en el mercado durante mucho tiempo y cada vez sea más difícil venderla.
Ponerle precio a una propiedad suele ser trabajo del vendedor, quienes en ocasiones incluso contratan a un tasador para asegurarse de que la cantidad requerida sea realista y justa, y se pueda vender lo más pronto posible.
La fórmula que utilizan los tasadores suele consistir de:
- Comparar propiedades similares
- Ajustar el precio según las diferencias que existan entre ellas (remodelaciones, buen estado de la casa, jardín incluido, etc.)
- Rastrear los movimientos del mercado
Estas 3 acciones son importantes debido a que todas juntas pueden calcular un precio exacto. El movimiento de los mercados (si se trata de un mercado de compradores o de vendedores) puede influir en el precio. Es decir, si hay pocos compradores y muchas casas disponibles, puede que el precio se tenga que reducir para que la propiedad se venda más rápido.
Por ello, comparar las propiedades en venta del vecindario o zonas similares puede ayudar de referencia al momento de calcular el valor de una casa.
2. Obtenga una tarifa plana en el MLS
El Servicio de Listado Múltiple es la lista más completa de ventas en bienes raíces en Estados Unidos. Está disponible para las Asociaciones de Agentes de Bienes Raíces (Realtors), y en algunas otras áreas. La mayoría de compradores comienzan buscando casas por medio de esta lista.
Existen algunos servicios que permiten anunciar la propiedad en el catálogo por algunos cientos de dólares, pero también puede buscar una tarifa plana que encontrará servicios similares en el área donde se encuentra la propiedad.
3. Coloque la propiedad en el mercado
Además de anunciarla en el MLS, es conveniente colocar anuncios de “En venta”, crear folletos, colocar anuncios en páginas de internet, e incluso crear una página especial para anunciar la casa, subir fotografías de la propiedad, y describir la casa con detalle.
Algunas empresas ofrecen paquetes de casas en venta diseñados para vendedores independientes. Estos paquetes pueden incluir la impresión de algunos folletos o anuncios de jardín.
Aunque esto parezca un gran gasto, el total suele ser equivalente a la comisión de un agente de bienes raíces, por lo que de haber contratado uno se hubiera gastado una cantidad similar.
4. Mantenga la casa abierta para visitas
También conocido como “open house”, se trata de una estrategia donde se abre la casa para todo aquel que la quiera conocer. Es importante colocar publicidad días antes en redes sociales o periódicos, y colocar publicidad por fuera el día que se abrirá.
En la mayoría de estos eventos, se recomienda tener preparadas algunas bebidas para los visitantes, además de folletos con toda la información posible (no olvidar los datos de contacto) para repartir.
5. Dar a conocer las características especiales de la casa
Cuando se redacte la información para anunciar la casa en anuncios o folletos, se debe incluir información como el precio, número de recámaras, número de baños, metros cuadrados, ubicación, y algunos otros detalles que se consideren importantes.
Si no se sabe cómo redactar este anuncio, puede comparar la información mostrada en sitios de bienes raíces, Asociaciones de Agentes de bienes raíces, o publicidad colocada en periódicos.
Si la propiedad cuenta con características especiales que pueden atraer compradores como ventanales, cocina remodelada, o una gran vista; no dude en incluirlo en su publicidad.
6. Prepárese para mostrar su casa
La propiedad debe estar limpia y arreglada para poder recibir visitas o dar tours.
Además de la limpieza general, es recomendable limpiar los mostradores y superficies de la cocina, lavar las alfombras, y guardar las pertenencias en su lugar.
La mayoría de los eventos se realizan cuando la casa aún se encuentra ocupada, por lo que lo mejor es hacer que la casa se vea limpia y sin la mayoría de los artículos personales posibles.
7. Muestre la casa
Es probable que deba colocar una copia de la llave en una caja, así como contestar llamadas de otros agentes, o de compradores. Si está en la casa durante el día, puede mostrar la propiedad por sí mismo. De otro modo, tendrá que confirmar con los agentes o compradores que hablen para que puedan tomar la llave y entrar a ver.
Otra opción es contratar a un agente para que muestre la casa por una comisión, sin que se vea involucrado en el resto del proceso. Sin embargo, se debe estar en constante comunicación con este agente para conocer los resultados de cada visita que dé. Algunos agentes incluso comparten todas las reseñas que dieron los compradores, siempre y cuando no afecte la confidencialidad con su cliente.
En el caso de no estar disponible para mostrar la casa a cualquier hora, procure que además de contar con un agente que pueda mostrarla, tenga a una persona de confianza disponible. Puede tratarse de algún vecino o algún familiar, que aunque no conozcan bien la casa, podrán estar al pendiente de que no haya ningún percance.
8. Haga sus propias negociaciones
Las negociaciones de bienes raíces pueden tomar forma en un contrato suscrito al vendedor. El vendedor puede aceptar la oferta, o bien, modificarlo y enviarlo al comprador. Este proceso puede continuar hasta que ambos hayan firmado el contrato.
En la mayoría de los estados, se maneja un contrato estándar para las compras de bienes raíces. Si no se conoce esta forma, lo mejor es dársela a un abogado para que la revise. O bien, contratar a un agente de bienes raíces que realice el trámite por una cuota menor.
Los agentes suelen cerrar estos tratos pronto para poder recibir su comisión, aunque muchas veces el vendedor no esté de acuerdo con el precio. Por ello, hacer las negociaciones por uno mismo, asegura hacer un trato que beneficie a ambas partes.
9. Asegurarse de cumplir todas las leyes del área
Es importante seguir este paso cuando se vende una propiedad. Algunas leyes son universales y pueden aplicar en cualquier área. Por ejemplo, la Ley de vivienda justa estipula que los vendedores no pueden discriminar a los compradores por razones como raza, religión, o género. Algunos contratos o acuerdos pueden ser encontrados en internet, y estos pueden ayudar cuando se comience a tramitar el proceso de venta, pero cabe recordar que se trata de contratos generalizados y quizás se deban añadir o eliminar algunas cláusulas que no apliquen. Para estos casos, lo mejor es contratar a un abogado de bienes raíces que revise todos los documentos relacionados con la propiedad y los trámites efectuados.
Vender una casa es un proceso tardado que puede no ser para todos, pues involucra mucho papeleo, esfuerzo, y paciencia que quizás no todos los vendedores tengan.
Asimismo, hay muchas condiciones que pueden favorecer o incluso empeorar un proceso. Sin embargo, si considera que puede vender su propiedad sin ayuda de un agente, estos consejos le servirán para lograr la venta paso a paso, además de poder ahorrarse un poco de dinero que iría destinado a la comisión del agente.